...Pero no creo que sea la única persona que está cansada de libros y películas llenos de personajes de muñeco de papel que no te importan, que no tienen amor propio ni respeto por nadie ni por ninguna institución....Y no quiero parecer sermoneadora ni victoriana, pero estoy cansada de la amoralidad en la ficción y en la vida real. La inmoralidad es un dilema humano fascinante que crea suspense para los lectores y tensión para los personajes, pero ¿dónde está la tensión en una situación amoral? Cuando la gente no tiene un código personal, nada es amenazador y nada tiene sentido.