-
Los necios a veces enseñan a los sabios: Tenso demasiado esta cuerda de la vida, queriendo hacer una música que salve. Mis ojos se oscurecen ahora que ven la verdad, Mis fuerzas menguan ahora que más las necesito; Ojalá tuviera la ayuda que el hombre debe tener, Pues moriré, cuya vida era toda la esperanza de los hombres.