Carmina Burana de Carl Orff tiene la capacidad de llevarte de la placidez al poder en un soplo sonoro. Es música de dignidad y fuerza, con pasajes primitivos y enérgicos, que evoca la belleza absoluta a partir de las frases más sencillas. Saca a relucir algo que tiene todo que ver con la trascendencia: una alegría exprimida y un motivo que no puedes dejar escapar: se queda contigo.