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Prueba cada obra de intelecto o fe, Y todo lo que tus propias manos han forjado Y llama a esas obras extravagancia de aliento Que no son adecuadas para hombres como los que vienen Orgullosos, con los ojos abiertos y riendo a la tumba.
Prueba cada obra de intelecto o fe, Y todo lo que tus propias manos han forjado Y llama a esas obras extravagancia de aliento Que no son adecuadas para hombres como los que vienen Orgullosos, con los ojos abiertos y riendo a la tumba.