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¡Detengan esas malditas fotos! No me importa lo que los periódicos escriban sobre mí. Mis electores no saben leer. Pero, maldita sea, ¡pueden ver las fotos!
¡Detengan esas malditas fotos! No me importa lo que los periódicos escriban sobre mí. Mis electores no saben leer. Pero, maldita sea, ¡pueden ver las fotos!