Debemos adoptar reformas que amplíen el abanico de oportunidades para todos los estadounidenses. Sólo podremos hacer realidad el sueño americano cuando cada persona tenga una oportunidad justa de realizar sus propios sueños. Esto significa igualdad de derechos de voto, igualdad de oportunidades de empleo y nuevas oportunidades para ampliar la propiedad, porque para estar seguras de sus derechos humanos, las personas necesitan tener acceso a los derechos de propiedad.