-
Al final, cuando morimos, tenemos a los queridos ángeles como escolta en el camino. Ellos, que pueden tomar el mundo entero en sus manos, seguramente también pueden custodiar nuestras almas, para que hagan ese último viaje con seguridad.
Al final, cuando morimos, tenemos a los queridos ángeles como escolta en el camino. Ellos, que pueden tomar el mundo entero en sus manos, seguramente también pueden custodiar nuestras almas, para que hagan ese último viaje con seguridad.