Mentir es hacer un mal uso del lenguaje. Lo sabemos. Debemos recordar que también funciona a la inversa. Incluso con las mejores intenciones, el lenguaje mal empleado, el lenguaje utilizado de forma estúpida, descuidada, brutal, el lenguaje mal empleado, genera mentiras, medias verdades, confusión. En ese sentido puede decirse que la gramática es moral. Y en ese sentido digo que el primer deber de un escritor es utilizar bien el lenguaje.