-
Soy afortunado: Puedo jugar todo el tiempo que quiera. No hay ningún entrenador o preparador físico que me vaya a decir que estoy descartado o despedido, que es hora de seguir adelante. Puedo jugar todo el tiempo que quiera.
Soy afortunado: Puedo jugar todo el tiempo que quiera. No hay ningún entrenador o preparador físico que me vaya a decir que estoy descartado o despedido, que es hora de seguir adelante. Puedo jugar todo el tiempo que quiera.