-
El príncipe de El Leopardo era un personaje muy complejo -a veces autocrático, grosero, fuerte-, a veces romántico, bueno, comprensivo -y a veces incluso estúpido- y, sobre todo, misterioso.
El príncipe de El Leopardo era un personaje muy complejo -a veces autocrático, grosero, fuerte-, a veces romántico, bueno, comprensivo -y a veces incluso estúpido- y, sobre todo, misterioso.