-
Hay algo bastante maravilloso en el hecho de que Oxford sea una ciudad muy pequeña que contiene la mayoría de las instalaciones culturales y metropolitanas que se puedan desear, en cuanto a librerías, teatro, cine, conversación. Pero está lo suficientemente cerca de Londres como para llegar en una hora, y lo suficientemente cerca de enormes espacios abiertos sin los cuales me volvería loco.