-
La adolescencia golpea más fuerte a los chicos que a las chicas. Las chicas sangran un poco y se les salen los pechos, gran cosa, pero la adolescencia cae sobre un chico con los dos pies. . . . Tu cuerpo es engullido por sustancias químicas de rabia y desesperación, golpeas, chillas, golpeas tu cabeza contra los árboles. Sales herido, sintiendo que la vida es incognoscible, que nunca se puede entender, sólo soportar y a veces engañar.