Se supone que ese es el grito de guerra de las mujeres en la era del SIDA: sin preservativo no hay sexo. Pero el pequeño y sucio secreto es que el grito de guerra es un susurro.... Lo que no se ha dicho en el frente heterosexual del SIDA es que el comportamiento sigue estando determinado por el viejo minueto psicosexual de los sexos, la falta de responsabilidad en los hombres jóvenes y de asertividad en las mujeres jóvenes.