Era todo emoción todo el tiempo, hablaba constantemente de sus sentimientos y de su profundo amor por ella. Le faltaban minutos para tener su primera regla. También escribía poemas. Es mi creencia personal que si los hombres están escribiendo poemas, están compensando algo más como un gran pelo hacia atrás, o una pelota. No es que una bola sea algo malo. Sobre todo porque no conozco a ninguna mujer que se muera por tener un par de pelotas. A mi modo de ver, cuantas menos bolas, mejor.