Llegó el día. La ira descendió. ¿Pecado, culpa y castigo? ¿Las psicosis maníacas de esas entidades a las que nos referíamos como estados, instituciones, sistemas -los poderes, los tronos, las dominaciones-, las cosas que perpetuamente se funden con los hombres y emergen de ellos? ¿Nuestra oscuridad, exteriorizada y visible? Se mire como se mire, se llegó al punto crítico. La ira descendió.