-
Si algún hombre se atreviera a traducir todo lo que hay en su corazón, a poner por escrito lo que es realmente su experiencia, lo que es verdaderamente su verdad, creo que entonces el mundo se iría al garete, que volaría en pedazos y ningún dios, ningún accidente, ninguna voluntad podría volver a ensamblar las piezas, los átomos, los elementos indestructibles que han ido a formar el mundo.