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Tuve mucha suerte. No creo en la suerte, así que fui muy afortunado. Dios me bendijo en términos de salud. ... Estaba muy sano. Pero intenté poner de mi parte en términos de preparación, en términos de perseverancia. Intenté poner de mi parte para asegurarme de que siempre estaba listo para jugar e intentar mantenerme en cabeza. Intenté vencer a la gente con la mente. No era el más grande ni el que saltaba más alto, pero tenía un alto coeficiente intelectual de baloncesto y lo sabía. ... Estudiaba el juego e intentaba prepararme, ser profesional y tener una buena actitud. Todas esas cosas me ayudaron a tener una larga carrera.