Autores:
  • Aunque nuestra misión institucional y nuestro destino no están en duda, la forma en que cada uno de nosotros participamos y comprendemos nuestras responsabilidades individuales requiere atención, esfuerzo y vigilancia constantes. BYU progresará y prosperará, pero nuestro éxito individual no está garantizado sin nuestros mejores esfuerzos personales y bendiciones dignamente recibidas.