Los militares estadounidenses de la Guardia y la Reserva dejan sus trabajos, sus cónyuges y sus hijos para vestir el uniforme que defiende a nuestro país. Este compromiso desinteresado debe ser honrado por las empresas en todo Massachusetts a medida que trabajamos para asegurar que son tratados de manera justa, mientras que el equilibrio de sus responsabilidades laborales y obligaciones con los servicios armados. Ninguna empresa debería anteponer nunca su cuenta de resultados a la primera línea de defensa de los Estados Unidos.