Autores:
  • Me contrataron para protagonizar un proyecto que iba a ser una obra de carácter increíble, que se exhibiría en todo el mundo. Era todo por lo que había trabajado y por lo que había sufrido. Tuve dos meses para prepararlo y me arruiné en el proceso. Una semana antes de subir al avión, todo el proyecto se vino abajo. No sólo me dejó completamente arruinado y sin trabajo, sino que me sentí traicionado por la interpretación. Actuar no es sólo algo que me gusta, sino una parte de lo que soy. Estaba destrozada. Por suerte, el amor de los que me rodeaban me ayudó a seguir adelante.