Creo que parte de la razón por la que la esquizofrenia se vinculó a las protestas por los derechos civiles en los años 60 fue porque la sociedad dominante codificaba las amenazas contra el buen funcionamiento del Estado como locura y las trataba como tales, y así, a medida que eso sucede, se ve la evolución de un proceso en el que las personas con esquizofrenia son cada vez más temidas y nuestros hospitales, en particular el tipo de hospital que analizo en el libro, se parecen cada vez más a prisiones, hasta el punto de que muchos de ellos, incluido el que comento, se convierten realmente en prisiones.