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La naturaleza con sus maravillas ciega y ata a uno todavía. No hay escapatoria. La amo totalmente a través de todos los tiempos y épocas. Para mí, las ciudades de todo el mundo son una prisión; los campos verdes son mi hogar.
La naturaleza con sus maravillas ciega y ata a uno todavía. No hay escapatoria. La amo totalmente a través de todos los tiempos y épocas. Para mí, las ciudades de todo el mundo son una prisión; los campos verdes son mi hogar.