Tras la ilegal decisión de reconocer Kosovo, todo el mundo esperaba que Rusia respondiera reconociendo la independencia y soberanía de Osetia del Sur y Abjasia. Es cierto, así fue. Todo el mundo esperaba la decisión de Rusia. Y teníamos el derecho moral de tomarla, pero no lo hicimos. Fuimos más que comedidos. No quiero ni comentarlo. En realidad, nos lo "tragamos".