Una de mis grandes experiencias en la vida fue ser entrevistado en un programa nocturno de entrevistas por un tipo llamado Tom Snyder. Me estaba entrevistando a propósito de un libro que yo había escrito sobre el Nuevo Testamento de la Biblia, titulado Rescatando la Biblia del Fundamentalismo, y hablamos de la datación de los libros del Nuevo Testamento, y yo dije: "Bueno, el consenso es que los evangelios se escribieron entre cuarenta y setenta años después de la crucifixión". Y él me detuvo y dijo: "Espere un minuto, Obispo, eso significa que no pudieron haber sido escritos por testigos oculares".