-
Le pedí [a Guadalupe] por el mundo, por la paz, por tantas cosas. Pedí perdón, pedí que la Iglesia creciera sana, pedí por el pueblo mexicano. Y otra cosa que pedí mucho: que los sacerdotes sean verdaderos sacerdotes, y las hermanas verdaderas hermanas, y los obispos verdaderos obispos. Como quiere el Señor.