-
Los miembros de las familias reales nacen en un mundo de indulgencia y derechos, y es posible que los principitos que crecen así nunca tengan que desarrollar la musculatura emocional que les permita mostrar autocontrol.
Los miembros de las familias reales nacen en un mundo de indulgencia y derechos, y es posible que los principitos que crecen así nunca tengan que desarrollar la musculatura emocional que les permita mostrar autocontrol.