Una revolución es provocar un cambio y nosotros somos personas espirituales que intentamos provocar un cambio espiritual. Puede parecer que soy un soñador, pero los modelos económicos han alcanzado su punto álgido de evolución. La tecnología ha evolucionado. Lo que no ha evolucionado es la espiritualidad de la humanidad; todo es de hace 3.000 años.