-
Si nuestra historia puede desafiar a la próxima oleada de músicos a seguir moviéndose y cambiando, a seguir espiritualmente hambrientos y cachondos, de eso se trata.
Si nuestra historia puede desafiar a la próxima oleada de músicos a seguir moviéndose y cambiando, a seguir espiritualmente hambrientos y cachondos, de eso se trata.