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Porque el veneno del odio asentado cerca del corazón duplica la carga para el que padece la enfermedad; se carga con su propia pena, y gime al ver la felicidad ajena.
Porque el veneno del odio asentado cerca del corazón duplica la carga para el que padece la enfermedad; se carga con su propia pena, y gime al ver la felicidad ajena.