-
Cuando era una niña en Sydney, nadie pensó: 'Oh, va a ser una estrella de cine'. Nadie. Tuve que arreglármelas con habilidad y talento.
Cuando era una niña en Sydney, nadie pensó: 'Oh, va a ser una estrella de cine'. Nadie. Tuve que arreglármelas con habilidad y talento.