Hay una lucha dentro de mí", le dijo un anciano a su hijo. "Es una lucha terrible entre dos lobos. Un lobo es el mal. Es la ira, la envidia, la tristeza, el arrepentimiento, la codicia, la arrogancia, la autocompasión, la culpa, el resentimiento, la inferioridad, la mentira, el falso orgullo, la superioridad y el ego. El otro lobo es bueno. Es la alegría, la paz, el amor, la esperanza, la serenidad, la humildad, la bondad, la benevolencia, la empatía, la generosidad, la verdad, la compasión y la fe. La misma lucha está teniendo lugar dentro de ti". El hijo lo pensó durante un minuto y luego preguntó: "¿Qué lobo ganará?". El anciano respondió simplemente: "El que tú alimentes".