Autores:
  • Los autores también crean personajes adorables y simpáticos, y luego proceden a hacerles cosas terribles, como arrojarlos a desagradables mazmorras controladas por bibliotecarios. Esto hace que los lectores se sientan heridos y preocupados por los personajes. La verdad es que a los autores les gusta hacer que la gente se retuerza. Si no fuera así, todas las novelas estarían llenas de simpáticos conejitos celebrando fiestas de cumpleaños.

    Brandon Sanderson (2016). “Alcatraz vs. the Evil Librarians”, p.164, Macmillan