-
Y cuando se ponga el sol y me apetezca, observaré el juego de los colores en el agua, me rendiré a las imágenes que se disuelven fugazmente y me convertiré en puro sentimiento, todo suave y agradable.
Y cuando se ponga el sol y me apetezca, observaré el juego de los colores en el agua, me rendiré a las imágenes que se disuelven fugazmente y me convertiré en puro sentimiento, todo suave y agradable.