Autores:
  • Dominar nuestras emociones no tiene nada que ver con el ascetismo o la represión, ya que el propósito no es romper las emociones o negarlas, sino "domar" las emociones, haciéndolas enseñables porque están domesticadas.

    Os Guinness (1976). “In Two Minds: The Dilemma of Doubt & how to Resolve it”, IVP Books