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Da a los padres la más mínima confidencia y la usarán como palanca para abrirte de par en par y reorganizar tu vida sin perspectiva. A veces me gustaría darles un mazazo. Quiero decirles que envidio su educación tan limpia, tan libre de futuro. Y quiero estrangularlos por entregarnos ciegamente el mundo como si fuera ropa interior marcada.