Autores:
  • Le lancé una bola de fuego mientras buscaba un tesoro después de acabar con una banda de orcos, jugando a piedra, papel o tijera con cada orco para determinar quién prevalecería en combate. Esto es mucho más emocionante de lo que parece. Es bastante civilizado, y un poco raro. Vas corriendo detrás de alguien por el bosque, lo alcanzas, le enseñas los dientes y te sientas a jugar un poco al roshambo.