No creo que tengamos todas las palabras en un solo vocabulario para explicar lo que somos o por qué lo somos. No creo que tengamos la gama de emociones necesaria para sentir plenamente lo que siente otra persona. No creo que ninguno de nosotros pueda juzgar a otro ser humano. Somos criaturas incompletas, que apenas sobreviven. ¿Es posible -desde la perspectiva de esta Tierra que gira rápidamente y de nuestro veloz viaje de la cuna al ataúd- conocer la diferencia entre lo correcto, lo incorrecto, el bien y el mal? Ni siquiera sé si es útil intentarlo.