-
A veces, accidentalmente, introduces un dígito más en el año: por ejemplo, 19993 y añades 18.000 años a *ahora*, y te das cuenta de que el año 19993 existirá algún día y de que el tiempo es algo que da miedo, de verdad.
A veces, accidentalmente, introduces un dígito más en el año: por ejemplo, 19993 y añades 18.000 años a *ahora*, y te das cuenta de que el año 19993 existirá algún día y de que el tiempo es algo que da miedo, de verdad.