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Háblame de la verdad de la religión y te escucharé con gusto. Háblame del deber de la religión y te escucharé sumisamente. Pero no vengas a hablarme de los consuelos de la religión o sospecharé que no entiendes.
Háblame de la verdad de la religión y te escucharé con gusto. Háblame del deber de la religión y te escucharé sumisamente. Pero no vengas a hablarme de los consuelos de la religión o sospecharé que no entiendes.