-
Es una blasfemia separarse de la tierra y mirarla como a un dios. Es más que una blasfemia: es peligroso. Al fin y al cabo, nunca podremos ser dioses, pero podemos convertirnos en algo menos que humanos con una facilidad aterradora.
Es una blasfemia separarse de la tierra y mirarla como a un dios. Es más que una blasfemia: es peligroso. Al fin y al cabo, nunca podremos ser dioses, pero podemos convertirnos en algo menos que humanos con una facilidad aterradora.