No es malvado. Morón, que no es lo mismo. El mal presupone una decisión moral, intención y cierta previsión. Un imbécil o un patán, sin embargo, no se para a pensar ni a razonar. Actúa por instinto, como un animal estable, convencido de que está haciendo el bien, de que siempre tiene razón, y santurronamente orgulloso de ir por ahí jodiendo... a cualquiera que perciba como diferente a él, ya sea por el color de su piel, su credo, su lengua, su nacionalidad o... sus hábitos de ocio. Lo que el mundo necesita es más gente completamente malvada y menos cabezas de chorlito.