El pomo de la puerta se torció. "Voy contigo". Corrí hacia ella y la mantuve cerrada. "No, claro que no. No podemos llevar tu cuerpo inconsciente por el Centro. Además, te necesito aquí. Si algo sale mal, no puedo soportar que te hagan daño". "Espera, ¿entonces está bien si me lastimo?" preguntó Jack. "Sí", espeté al mismo tiempo que Lend y Arianna. "Mientras estés segura, entonces", murmuró Jack.