Autores:
  • Pero la gente siempre se acostumbra a la belleza". "Yo todavía no me he acostumbrado a ti", respondió sonriendo. Me ruboricé. "Gracias por venir a Ámsterdam", dijo. "Gracias por dejarme secuestrar tu deseo", dije. "Gracias por llevar ese vestido que es como whoa