Lo que sí me parece venenoso, lo que engendra un tipo de patriotismo que es pernicioso si dura, pero que no es probable que dure mucho en un adulto educado, es el adoctrinamiento perfectamente serio de los jóvenes en una historia a sabiendas falsa o sesgada: la leyenda heroica disfrazada de hecho de libro de texto. Con esto se arrastra la suposición tácita de que otras naciones no tienen igualmente sus héroes; quizás incluso la creencia -seguramente es muy mala biología- de que podemos "heredar" literalmente la tradición.