-
Intenta vivir con la misma intensidad que un niño. No pide explicaciones; se sumerge en cada día como si fuera una nueva aventura y, por la noche, duerme cansado y feliz.
Intenta vivir con la misma intensidad que un niño. No pide explicaciones; se sumerge en cada día como si fuera una nueva aventura y, por la noche, duerme cansado y feliz.