-
Es inútil no buscar, no querer, porque cuando dejas de buscar empiezas a encontrar, y cuando dejas de querer, entonces la vida empieza a meterte su pescado y sus patatas fritas por el gaznate hasta que vomitas, y luego el vómito por el gaznate hasta que vomitas el vómito, y luego el vómito vomitado hasta que empieza a gustarte.