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No me agrada ningún hombre que desprecie la música. No es una invención nuestra: es un don de Dios. La sitúo junto a la teología. Satanás odia la música: sabe cómo expulsa de nosotros el espíritu maligno.
No me agrada ningún hombre que desprecie la música. No es una invención nuestra: es un don de Dios. La sitúo junto a la teología. Satanás odia la música: sabe cómo expulsa de nosotros el espíritu maligno.