Creo que Silicon Valley es realmente un lugar de excelencia y el impacto de esta pequeña comunidad en el mundo es totalmente desproporcionado en relación con su tamaño. Somos los líderes indiscutibles del cambio tecnológico. Pero con nuestra abundancia de talento y recursos, también tenemos la oportunidad de ser los pioneros del cambio social y, en última instancia, ésta puede ser nuestra mayor contribución.