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Era deprimente, ... Me preocupaba cómo iba a ganarme la vida. No quería quedarme en la granja. No me ofrecía el reto que quería y, sin embargo, sin una educación universitaria, sentía que realmente no tenía suerte.
Era deprimente, ... Me preocupaba cómo iba a ganarme la vida. No quería quedarme en la granja. No me ofrecía el reto que quería y, sin embargo, sin una educación universitaria, sentía que realmente no tenía suerte.