-
La autodisciplina comienza con el dominio de tus pensamientos. Si no controlas lo que piensas, no puedes controlar lo que haces. Simplemente, la autodisciplina te permite pensar primero y actuar después.
La autodisciplina comienza con el dominio de tus pensamientos. Si no controlas lo que piensas, no puedes controlar lo que haces. Simplemente, la autodisciplina te permite pensar primero y actuar después.